Hola a todos, miren que curioseando por ahí me encontre con este articulo, que si no me equivoco salió publicado en el por esto! el día de hoy.
El autor es el Ing. Humberto Sauri Duch y creo que la mayoría de los foristas, sino es que todos, estaremos de acuerdo con él........
Desde la visión del Ing. Humberto Sauri DuchHumberto Sauri Duch:
Lo importante aquí es ir por delante, saber qué se necesita, para que salgan las cosas bien..-
El ingeniero Humberto Sauri Dutch, secretario técnico del Plan Estratégico de Desarrollo de Mérida, habló ayer de las virtudes y defectos del recién presentado “Plan Maestro de Ucú”.De las primeras apuntó las siguientes:—
Por fin contamos con una propuesta de lo que tenemos que tomar en cuenta a mediano y largo plazo. Bueno hubiera sido que otras ciudades de la Entidad, incluida Mérida, la hubieran tenido así, diseñada con tiempo para que no crecieran desordenadamente y sin un plan rector maestro. Lo importante es ir por delante, saber qué se necesita, para que salgan las cosas bien.
Lo que falta —
Ucú necesita un plan maestro con tiempos: Que se diga cuál es la infraestructura interior y exterior, la política de ocupación del suelo y la temporalidad. Tenemos una oportunidad de hacer las cosas bien, entonces hay que hacerlas bien. Además hay que definir de dónde va a venir el agua, porque no podría ser de la que consume Mérida, y definir también dónde va a estar el basurero, dónde van a estar los servicios públicos.Otras opcionesTambién falta tomar en cuenta que antes de ocupar Ucú, que tendrá 58 mil casas, tenemos que ocupar Ciudad Caucel, que no va ni a la tercera parte y tendrá en total 40 mil casas. En este punto hay que señalar otras tres cosas:
La primera, que todavía queda mucho espacio para construir casas al interior del Periférico de Mérida.
La segunda, que nuestra ciudad tiene mucha vivienda desocupada: Hay 30 ó 50 mil viviendas desocupadas que se están deteriorando al paso del tiempo sin utilidad alguna. Y se necesitaría un programa que permita que esas viviendas sin uso se conviertan en oportunidades a través del financiamiento institucional para las personas que no tienen un techo propio.
Y la tercera, que hay un proyecto de reordenamiento urbano en el sur, atrás del aeropuerto, que contempla un gran y muy completo desarrollo urbano para sacar del atraso a esa zona que actualmente está prácticamente desconectada de Mérida.
Los defectos:
El Plan Ucú necesita una visión global e integrada, Ucú la tiene hacia adentro, pero no hacia afuera, por lo que hay que integrar esa visión al proyecto. Esa visión podría significar, por ejemplo, hacer una autopista amplia y segura que pasando por Ucú llegue a Sisal, para que ayude a detonar el desarrollo de la bellísima costa entre ese Puerto y Celestún y entre Sisal y Progreso. De otro modo, podría ser que al terminar de hacer las casas, alguien se acuerde y diga: Se nos olvidó la carretera para los que van a ir a trabajar a la costa.Se necesita también el proyecto de interconectividad con Mérida, porque al estar tan cercanas, tienen que tener grandes vías de comunicación terrestre entre sí.
Para que no pase lo que ocurre ahora con Ciudad Caucel, que como no tiene suficientes vías alternas de acceso, ha convertido a la avenida Jacinto Canek es un caos a determinadas horas del día. Esto pasa también con los otros nuevos desarrollos de casas llamados fraccionamientos, porque no hay un proyecto urbano para poder incorporarlos a la conectividad urbana.
Otro punto importante es el del transporte público masivo, porque los que vivan en Ucú tienen que tener un buen transporte público, para que no les pase lo que a los habitantes de Ciudad Caucel, donde la gente tiene que caminar bajo el sol hasta 600 metros para tomar el camión, y luego resulta que no la dejan en el centro, sino en el Centenario, por lo que tiene que tomar otro camión y tal vez otro, lo que viene saliendo demasiado caro para su nivel de ingresos.La verdad en el asunto del transporte En este punto recuerdo una reunión sobre transporte urbano de pasajeros que tuvimos en México, con la presencia de autoridades municipales de todo el país. Allá un funcionario del Metro, viendo que algunos daban muchos rodeos para reconocer los problemas verdaderos, dijo algo que aquí todavía nos empeñamos en ignorar:—Ya déjense de cuentos, si quieren ustedes tener un transporte urbano que atienda realmente las necesidades de la población, tiene que ser diseñado por especialistas del transporte comprometidos con los verdaderos intereses de la sociedad, no por los permisionarios.Y es lógico, porque los permisionarios ven el transporte como negocio, no como servicio. Recuerdo que durante una campaña política, una personalidad política emergente recibió la visita de un permisionario yucateco que le dijo:—Mira, a mi me gustan tus propuestas, por eso aquí te doy el control de la ganancia de 10 camiones, para que te ayudes durante toda su campaña.Desde luego, le aceptaron esa “ayuda”, y después, cuando ganó el cargo la persona por la que simpatizaba, resultó el permisionario más beneficiado.
¿Areas verdes?
Al Plan Ucú le faltan también áreas verdes, 180 hectáreas es muy poco para el tamaño del proyecto. Se necesitarían cuando menos 300 hectáreas de áreas verdes, y no desperdigadas, para que cumplan plenamente su función de ser pulmones de la ciudad y lugares de esparcimiento y descanso visual y mental. A esto recuerdo que en una reunión internacional realizada en Sudamérica, en la que estaban los alcaldes de algunas grandes ciudades del continente,
me preguntaron cuántos parques tiene Mérida, cuando les respondí que 365, dato del período de Xavier Abreu, se asombraron. Entonces preguntaron cuántos habitantes tenía la ciudad. “Unos 800 mil”, respondí. Entonces, dudando, me preguntaron: —¿Y de qué tamaño son sus parques? Dije que algunos de una manzana, otros de media, incluso otros mas pequeños. De hecho el más grandecito es el del Centenario, que tiene cerca de dos hectáreas. Entonces me dijeron algo que deberíamos tener en cuenta si queremos ponernos a nivel del mundo moderno: —Esos no son parques, son jardines urbanos. TORCIDO Los parques tienen 20 ó 30 hectáreas. Lo malo no fue que lo dijeran, sino que es cierto: Bogotá, Sao Paulo, Santiago de Chile y otras ciudades tienen grandes parques de ese tamaño, e incluso Nueva York, que es la ciudad más cara del planeta, tiene en una de las zonas de mayor plusvalía el enorme Central Park. De tal modo, Ucú, para responder realmente a las necesidades de recreación y descanso de sus habitantes, tendría que contemplar parques de 20 ó 30 hectáreas, además de los jardincitos urbanos a los que estamos acostumbrados.
Lo que necesitan Mérida y otras ciudades
Mérida está creciendo y sólo se detiene cuando llega a una ruina arqueológica, pero para rodearla y seguir, hasta que llegue al mar. Por eso necesita un modelo de densificación. Como te decía, del periférico hacia adentro de nuestra ciudad todavía hay suficiente superficie para hacer vivienda, no tiene por qué salirse de ese cinturón. Pero como Mérida tiene un proyecto de desarrollo urbano del municipio que no está actualizado y no define la ciudad en función de su crecimiento sino determina los usos y destinos de la Mérida que existe, crece sin ton ni son.Tampoco cuentan con una estructura de desarrollo otras ciudades como Motul, Tizimín, y Valladolid. Es un problema de todo Yucatán. A veces, consultores oportunistas han elaborado planes promotores de expansión de lo que existe: Donde hay pobreza, que siga, donde hay densidad, que siga, y así, pero eso no es un plan, es simplemente una ratificación de lo que está mal. Validan lo malo de la ciudad. Otro problema, en el caso de Mérida, es que quienes están promoviendo el desarrollo de vivienda no tienen una infraestructura primaria, no hay propuesta de ciudad, no hay proyecto, lo que les presentan son los lineamientos generales de lo que será el proyecto, para que hagan ellos su plan parcial y lo agreguen a la ciudad, pero la suma de planes parciales no es un plan de desarrollo urbano. De hecho, en los últimos 20 años no hemos tenido un plan de desarrollo urbano. No hay un plan maestro de desarrollo urbano de Mérida. Lo podemos ver con algo tan sencillo como los camellones que se construyen en la ciudad, que para ser elementos de equipamiento deben tener cuando menos de tres metros, de otro modo son divisores de carriles y se convierten en obstáculos y luego les van cortando pedacitos para dar más paso a los carros en detrimento de los peatones.
Tres elementos en la factibilidadHablando sobre el Plan de Ucú, que seguramente necesitará un estudio de impacto ambiental, Sauri Dutch señaló:
—En México no hemos entendido que es un impacto ambiental. Aquí se titula Manifiesto de Impacto Ambiental, pero no lo es, porque se hace tomando en cuenta sólo si deja o no deja dinero; en cambio, en Europa lo importante para definir su factibilidad son los parámetros de impacto ambiental, ya que en un verdadero estudio de factibilidad lo ambiental debe tener tanto peso como lo económico y lo social.Equipamiento ceroOtro problema a enfrentar, no sólo en Caucel, sino también en Ucú y en los demás desarrollos nuevos es el del equipamiento, que debe estar listo antes de entregar las viviendas, porque de otro modo la gente entra a vivir en un desierto. Los primeros que compraron en Ciudad Caucel están comprando en un desierto, hay que cambiar las formas de recepción de los fraccionamientos dándole un tinte de responsabilidad para con la vivienda y las familias. Actualmente, el Ayuntamiento no recibe antes de que esté vendido prácticamente todo y ocupado casi todo, pero entonces el que sufre es el ciudadano, porque le entregan su casa con equipamiento cero: No hay jardines urbanos ni parques, no hay áreas verdes, no hay escuelas, no hay guarderías, no hay comercios, no hay casetas de vigilancia policíaca, no hay rutas de camiones o si las hay no tienen horarios adecuados, no hay servicio de recoja de basura, no hay teléfonos, no hay señalamientos viales, no hay alumbrado público y si lo hay tiene deudas, no hay sistema de alcantarillado, no hay nada más que las casas. Y lo peor es que hay fraccionamientos que nunca son recibidos por parte del Ayuntamiento, y como se generan gastos diversos para el inversionista mientras el Ayuntamiento recibe el fraccionamiento, entonces venden las áreas verdes o las hipotecan, afectando el entorno en el que crecerán y vivirán las nuevas generaciones.Por eso es completamente necesario contar con una normatividad que establezca que cuando las casas se entreguen ya se cuente en el nuevo fraccionamiento con todo el equipamiento urbano necesario e indispensable para llevar una vida sana y segura.
Formas de construcción ecológica
También hay que avanzar en la normatividad ecológica en el aspecto de cómo afecta la temperatura de las casas, porque el desarrollador de vivienda, dado que nuestro clima es tropical y muy caluroso, con mucho sol, debería prever que las casas no sean calientes, pero como no hay normatividad, algunos hacen las casas sin la llamada “bolsa de aire”, es decir, sin bloques. Las hacen de pared dura, de puro concreto, que se calienta mucho más. En otros países cálidos, e incluso ahora en la ciudad de Mexicali, se exige que las casas no solo tengan bloques huecos en medio, sino que esos huecos tienen que estar rellenados con un material altamente aislante del calor que se llama poliestireno
, lo que brinda a las familias que las ocupan una vida más sana y menos dura. Sobre todo porque esas casas que no están hechas de bloques, en nuestro clima no son fáciles de enfriar ni teniendo encendido todo el día el aire acondicionado, lo que por cierto costaría una fortuna.
Falta de árboles
Cuando se desarrolló Francisco de Montejo, desde el aire se veía como un desierto, estaba sin árboles. Luego la gente fue poniendo algunos, pero le falta mucho todavía en ese aspecto. Ahora hay otro nuevo fraccionamiento al que los pilotos de aviones le dicen el panteón, porque desde el aire las casas, todas pelonas, sin vegetación, se ven como lápidas. Es el problema de una falta de normatividad que cambie las cosas, adecuándolas al momento en que se vive en el mundo, rompiendo los esquemas de lo que está mal, para que todos vivan mejor.Falta de integralidadUn aspecto más del problema es la falta de integralidad en los procesos de autorización de los permisos de construcción. Los constructores invierten de 8 meses a año y medio en obtener todos los permisos, porque hay que ir a las ventanillas del Ayuntamiento, de la Japay, de la CNA, del Inah, de la CFE, etcétera. Y a veces en una te dicen: esta no te la podemos tramitar hasta que tengas esta otra, que debe ir antes. Después, cuando ya tiene todo listo, con frecuencia resulta que las condiciones del mercado de vivienda ya cambiaron, y que desaprovechó la oportunidad que tenía. Hay que ver todas estas cosas también en Ucú.(Roberto López Méndez
Que PEKS!! que dato tan interesante y un tanto bochornoso lo de nuestros parques, bueno lo de nuestros jardines urbanos y super wow por lo de los bloques rellenos de poliestireno en Mexicali, pos como no se nos ocurrió antes????? Bueno pos hoy si puedo decir que aprendí algo
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Bueno, TONSKE!!! pa cuando nuestro "meeting", que les parece este Fin, como habíamos quedado, un sabado en la tarde noche por el centro de la ciudad
Bueno chekenle y me comentan....SALUDITOS